Sírvame un aguardientovsky pero sin mucha farrovsky: el análisis y el uno x uno de la clasificación ante Perú

13

Antes que todo debemos darle gracias a Diosito, a Baal, a Astaroth, Jeroboam, Kim Gordon, el espíritu del Boricua Zárate o el que sea que haya que agradecerle, por mover los engranajes que regulan el universo para que nos tocara Perú en la fecha definitiva por clasificar al Mundial. Porque te cuento que si en vez de esos pobres muchachos con la banda roja que mostraban el susto en la cara y en las vueltas que le dieron por 60 minutos para pasar de la media cancha, nos hubiesen tocado unos brasileños en pleno Paseinho_da_vitoria, o unos chilenos con ganas de cagarnos el plato, o unos argentinos que nos asustan así sea mandando los veteranos que clasificaron robándole a los mismos peruanos en 1985, no estaríamos hoy celebrando nuestra sexta clasificación a un Mundial de Fútbol, la primera después del infame «Era gol de...», que sea lo que sea espero sea enterrado por siempre del inconsciente colectivo así sea con alguna otra churreteada en Rusia 2018.

Iba a decir “con la cabeza fría pienso que…” pero me retracto porque si algo no dejó este partido fue la cabeza caliente. Clasificamos a nuestro sexto Mundial jugando horrible, con casi todos los jugadores en modo de despertarse de la siesta del primero de enero a las 4 de la tarde. Es que la selección hoy fue no te digo un manojo de nervios, sino un cúmulo de tensiones individuales que todas juntas resultaron en un ambiente tan espeso que podía uno meterse a la cancha y caminar encima de ellos. Todo el partido fue un nudo a la garganta colectivo de la selección, que mostró un engarrote digno de equipo de Pedro Sarmiento haciéndole el cajón. El balón quemaba en los pies, la consigna era salir de él y las pocas veces que llegaba a los que saben (o se supone que) se pegaban una enredada peor que uno explicándole a la novia por qué lo llamó al celular una nena que le aparece a uno con el contacto «John Freddy Taller«. El juego de nosotros fue farragoso, espeso, nulo, con muchas imprecisiones, de esas que uno ya deja de quejarse a los 40 minutos y se resigna esperando que a alguno se le ocurra prender la lamparita.

No falta el colado en la fiesta

Pekerman sorprendió de arranque metiendo a Duván Zapata junto a Falcao en el ataque, quién sabe (estamos esperando aún el reporte de nuestro contacto dentro del cuerpo técnico de Pekerman, pero parece que tiene el celular apagado) si con la intención de explotar las dudas de los paisanos de Laura Bozzo arriba, y/o ganar posesión a punta de potencia. Sea como sea, le resultó. Duván fue la figura del equipo, pivoteando como podía, ganando varios morteros que le llegaban – no todos, entre Renato Tapia y Alberto Rodríguez se turnaron para controlarlo – y metiendo a ratos rushes (?) de potencia que ponían al respetable a fruncir ñango.

La cosa es que al final, y paradójicamente, el sistema que montó Pekerman con Duván también nos perjudicó un toque porque el equipo se emocionó a lanzarle ollazos al pelao para que este viera qué hacía, y esto resultó muchas veces en un balón perdido -> peruanos saliendo desde abajo -> nosotros a penar. También hizo que nuestro crack, el que apareció cuando tocaba, el gran Falcao, quedara como en una zona gris en que ni era punta ni era mediapunta, y lo que hizo fue aportar más que todo ganas y sapiencia, y también en buena medida respeto para que los peruanos no se mandaran arriba. Yo aquí pensando huevonadas creo que a Pekerman lo convencía la titularidad de Duván por lo explicado arriba pero si lo metía cómo putas iba a sacar a Falcao precisamente en el partido que definía si se iba con nosotros a Rusia o esperaba en su casa que lo llamara algún Honduras. Entonces optó por la tibia solución de dejarlos a los dos y rezar para que uno de ellos no desapareciera. Pero sí, le tocó al 9 del Mónaco el sacrificio.

Después vino el gol marica que se hace David (otro y van… qué cagada, sea cual sea el equipo al que le voy estoy diciendo seguido eso de «el gol marica que le hacen a David«), y el partido agarró otro nivel. Pero ya desde el inexplicable cambio de Wilmar Barrios por Duván le regalamos a los peruanos todas las boletas para la rifa del empate: Pekerman sacó al mejor hombre en el ataque nuestro para meter a un volante puro de pata y marca. Ahí mismo fue que les regalamos la bola y los invitamos a que nos llegaran, y vuelvo a decir eso que gracias al cielo que enfrente teníamos a los peruanos y no a chilenos azarados, por ejemplo. Afortunadamente aguantamos el chaparrón y sobre todo se nos dieron los resultados, y por eso ya faltando un minuto para terminar todo el asunto veías a Falcao hablando con los jugadores peruanos y apelando a la larga amistad entre ambos pueblos para pactar una tregua que nos dejara contentos a los dos. Para coronar la alianza hacía falta enviar un claro mensaje para que todos estuvieran tranquilos:  Pekerman decidió entonces avisarle a Gareca que quería meter el partido en el congelador y ahí fue que metió a la cancha a Gio Moreno (?).

Este man nos hizo todo el partido. Qué digo el partido: les hizo a los peruanos TODA la Eliminatoria…

Viendo en retrospectiva me parece que desaprovechamos una opción (bueno, al final clasificamos entonces vale verga, pero sigo) de haber ganado el partido sin poner a parir a todos los que lo veíamos desde afuera. Porque te cuento que los peruanos entraron ca-ga-dos: si nosotros teníamos la Garrotera ellos estaban era apabullados de miedo, cagados en las patas. A los jugadores peruanos les jugó en contra el ambiente hiperhistérico del Nacional y la farandulería de su afición, porque no fueron ese equipo metelón y correlón que ponía a los rivales a correr detrás de uno solo para ver cómo le pasaba el balón a otro, y así. Nanay: nadie quería tomar el riesgo de irse arriba a ver qué onda. Las únicas veces que lo hicieron en el PT se fueron por el lado de Fabra, que al menos en defensa ayer no fue Fabrrrrra y cumplió. Y cuando digo «cumplió» no quiero decir que se hizo un partidazo y que le mandó a comer mondá a toda Colombia, sino que simplemente no hizo cagadas. Si nosotros hubiésemos estado un toquecito más finos, si nuestro 10 no hubiese estado tan perdido, si en vez de dos pánzer arriba tuviéramos uno y otro que los hiciera correr (¿qué tal hubiese sido con Chará desde el inicio?) la gente ya hubiera estado con dos panchitas/medias de guaro encima al minuto 60. Pero insisto, al final VV (vale verga) porque pasamos, gracias a Venezuela y Brasil Dios.

El uno x uno

A uno que se vuelve sentimental con los años le cuesta darle garrote a David Ospina (4). Pero qué podemos decir, si los tres goles que recibimos en esta última doble fecha fueron de él: los dos regalos contra Paraguay y la mano cagada que metió al tiro de Guerrero ayer. El tema también es jodido de analizar porque ajá, esta el partido todo parido, con una oportunidad de gol inminente, y de repente ve el man un tiro que va a gol, y le mete la mano. El detalle técnico es que no solo al tocarla con la mano avala una jugada que inicialmente no debía haberlo sido – el sapo de negro cobró fue tiro indirecto -, sino que aparte no sacó el hijueputa balón. Entonces el gol es todito de David, independientemente si alguno de la barrera saltó y la ttotototocó. David nos salvó muchas veces en estas Eliminatorias, pero hay que cobrarle estos 5 puntos que dejamos de ganar por él.

La defensa en general pasó raspando, para mí, pero cumplió. De los centrales para mí el mejor fue Dávinson (7) atento, fuerte y preciso en la marca, que sin nada de nervios mandaba todo a la mierda y cepillaba las canillas rivales a modo de bonus track. A Oscar Murillo (5) no lo ví tan bien: el man le tocó estar encima de esa culebra venenosa de Paolo Guerrero, y varias veces perdió. A punta de físico y de ganas emparejó algo el rendimiento, pero no le alcanzó para destacarse, a mi entender. Lo mejor fue que por el lado de los laterales esta vez no sufrimos: ni Arias ni Fabra (5 ambos) pasaron demasiados problemas, aunque el ataque peruano se decantó a ratos por el lado de este último y ahí pasamos algunos momentos incómodos. Lo bonito era ver la solidaridad de los compañeros que iban todos a ayudarle a Fabra a sacar el agua que se le estaba colando a la casa, como diciéndole disimuladamente «tranquilo pana que usted no puede con eso, venga le ayudo…«. Ahora: también ayudaron los peruanos al no explotar las bandas como debían, y en eso no sé si la culpa es de l señor con cara de señora mayor que hace de DT de Perú, o si fue que a los extremos peruanos se les olvidó subir por su lado porque ya el solo hecho de pensar en que iban a clasificar les copó la memoria RAM. Es que te digo que en un día así normal, los incas nos desbordaban con Trauco, Carrillo y los chiquitos esos correlones que tienen, y ahí sí agárrate porque nos mataban.

Ya tenía que venir el momento en ver a «La Roca» Sánchez (5) jugar no uno, sino dos partidos horribles seguidos. El man que nunca se equivocaba, el que siempre rendía cuando todos los otros desaparecían, el que nunca dejaba de decir «Aquí estoy no joda» (o como sea que digan por allá de donde es él), jugó muy mal ayer, regalando varios balones y mostrando desubique por ratos. Le dejo en 5 porque por otros momentos se rehizo y cumplió en su rol de «estorber» en la cancha, sobre todo cuando regalamos el balón y los de la banda roja se nos vinieron encima. Abel (5) para mí estuvo perdido, pero ayudó un poco en la organización general.

Vamos al líder de la tabla de «CAREMONDÁ» recibidos en toda la Eliminatoria: con Juan Guillermo Cuadrado (3) se nos agotó la capacidad de queja. Es un man que decide todas mal, que juega para adentro solo para encerrarse, que juega para afuera solo para mandar un centrico, que desborda solo para perder el balón. No hace NADA bien, no aporta ni siquiera ganas en la selección. Ayer fue todo lo mismo, con el plus que sea por contagiarse de los nervios generales o sea por ya saber que vale mondá (?) el man desaprovechó un par de jugadas por no querer centrar y devolvérsela al compañero que se la había pasado con el objetivo que, ajá, desbordara o lo que sea pero que hiciera algo con el puto balón. Entonces anoche tampoco se redimió el man: urge buscarle reemplazo urgente porque si seguimos con él se incrementarán fuertemente las hijueputeadas en horas de madrugada. El tipo indudablemente no es un paquete, porque jugar y sostenerse en un grande como la Juve no es fácil. Pero representa uno de esos curiosos casos de tipos a los que no les queda grande la camiseta de un equipo prestigioso pero sí las de una selección cagada como la nuestra.

El tatarataque

Y sigamos con James (5). Para este pechito James jugó mal, pésimamente mal, distribuyendo erráticamente, perdiendo muchos balones y no ayudando al juego ofensivo del equipo. En algunos círculos (?) hay discusión sobre el rol de James ayer, y muchos dicen que el man jugó bien. Lo que me lleva a pensar en qué tan tolerantes estamos con James como para decir que por un partido tan mediocre como el de ayer «jugó bien», o si es que la gente confunde las ganas que siempre le mete el pelao en la selección – es indudable esto – con buen juego. Para mí solo el gol lo salvó ayer, y le dio un punto más en esta calificación que seguro si él mira se va a bajonear y llorar encima de las tetas perfectamente hechas de la rusa, porque en realidad no jugó para más de 4.

El partido de ambos delanteros para mí debe juzgarse con base en lo que les llegó, que no fue mucho. A ambos les costaba generar jugadas porque cada vez que les llegaba el balón tenían encima como a seis peruanos ya dispuestos a escalarse por si alguno pasaba el primer filtro. Sé que soy benévolo con Falcao (5) que la guerreó como pudo ante los defensas, y generalmente alejado de su zona de peligro. La figura, como lo dijimos arriba, fue de lejos Diván, perdón, Duván Zapata (7) que no hizo el juego perfecto pero se las fajó solito con los centrales, pivoteó bien ganando varias y por ratos arrancó con mucha potencia a resquebrajar la atribulada defensa incaica. Le abonamos sobre todo a Duván que no se churreteó ni se lo comió la atmósfera del primer partido, algo que sí les pasó a otros como bien nos recuerda el corresponsal Juan Mecha desde la paradisíaca Sincelejo, a un tal Mateus Uribe contra ¡Bolivia! en Barranquilla.

En resumen esta clasificación se debe disfrutar con muchas ganas porque no es precisamente una costumbre establecida que vayamos a cada Mundial. Pero lo logramos en gran medida a pesar de nuestras limitaciones, con pocas variantes y pocas figuras como para destacar. A pesar que la mano del viejo Pekerman se le notó en varios momentos de estas Eliminatorias sería muy bacano ver al señor buscando alternativas a los varios puntos flojones que tenemos (recambio de arquero, laterales, recambio para el Divo), para pensar en no hacer un Francia 98 el otro año. Ahora, si miramos el vaso medio lleno nos daremos cuenta lo positivo que es clasificar a un Mundial con la afugia y parto suficiente para saber que NO somos nadie a nivel sudamericano: simplemente una buena selección que en una buena tarde puede dañarle el caminado a alguna grande.

Aquí cuadrando para ir a tomarse un tintico y chismosiar un poquito

 

13 pensamientos sobre “Sírvame un aguardientovsky pero sin mucha farrovsky: el análisis y el uno x uno de la clasificación ante Perú

  1. Master, excelente como siempre, pasamos pero raspando y mirando el marcador en todos lados, Una pregunta y dado que George abordo el tema de las juveniles en un post anterior me gustaría verlo opinar: Hay recambio para Cuadrado? Hay recambio para Arias? Hay la posibilidad de que dejen de llamar a los jugadores por nombre únicamente y se fijen mas en como rinden con la selección y el momento actual? lo de Cuadrado desespera pero me alarma enorme tambien esos cinco puntos perdidos por el lado de Ospina.

    1. Estamos bastante jodidos con el recambio, pero muy. Eso al menos según lo que uno ve de las recientes juveniles, son puro man tipo Equidad, genéricos y poco hábiles.

  2. Excelente Post don YSEC, lo leo siempre aunque no comento mucho.
    Es preocupante la falta de recambio, o digo yo mas bien, la falta de autoridad de Pekerman para sentar a varios pesos pesados y probar otras alternativas, lo de Cuadrado roza lo ridículo por lo desesperante que es este muchacho y lo de Arias por lo limitado tanto en ataque como en defensa, no puede ser tu lateral titular un muchacho al que desbordan con facilidad el 90% de las veces. El carril derecho de Colombia es una invitación a ser atacados y perjudicados.
    En el arco puede darsele oportunidad a otro arquero suplente, Camilo Vargas no es ni suplente en nacional, los centrales es la zona con mas jugadores de «buen nivel», pues se tiene a Davinson, Mina (si se recupera), Zapata y los Murillos.
    No hay cambio para La Roca, Barrios esta verde y no se convoca algun otro jugador.
    En ataque Duvan ayer demostro que no se arruga y que es una alternativa seria e incluso posible titular.
    Es hora de probar, estos 8 meses deben servir para que Chara se gane la titular, que aparezca una alternativa a La Roca y Aguilar que no es titular en el Cali pero inamovible en la seleccion. Dejar de convocar por nombre, llevar a Bacca, a Faryd Diaz Lesionado!!, a Matheus Uribe porque hizo un gol en Mexico, a Gio Moreno que es figura de un equipo de media tabla en la liga China, etc. Hay que encontrar algo mejor para hacer un buen mundial.
    Saludos.

    1. Gracias pana. Yo me la jugaría con Barrios desde ya: el man a pesar de bajones sabe a lo que juega y la tiene clarita en su función de lo que le toca hacer.

  3. Buen post. Me preocupa esa falta de recambio, los laterales tan limitados que tenemos y la poca generación de juego ofensivo y realmente temo mucho que se repita lo de Francia 98, un fin de ciclo con muchas amarguras.

  4. Joven(cof, cof) hágase una entrada de ese triángulo amoroso: Perú, Chile, Bolivia, eso merece novela, que yo te robo puntos que si son tuyos pero míos, que si me eliminas pero tú tampoco pasas, que te elimino pero mejor ya no, que al final mi demanda me costó más a mí que a ti, ni culebrón mexicano!!!

  5. Recambio, veamos que hay:
    Laterales derechos:
    Bocanegra (nacional)
    Marlon Piedrahita (junior)
    David Murillo (junior)
    Felipe Banguero (millonarios)
    Elvis Mosquera (envigado)
    Carlos Mario Arboleda (santa fe)
    Daniel Muñoz (itagui)
    Elvis Perlaza (huila)
    Dany Rosero (cali)
    Ivan Vélez (america)
    Mateo Puerta (tulua)
    Jhon Alex Cano (equidad)
    Julian Pretel (patriotas)
    Francisco Cordoba (pasto)
    Fabio Rodriguez (bucaramanga)
    Elvis Gonzalez (Jaguares)
    Omer Escalante (Tigres)
    Cristian Florez (alianza)
    Luis Murillo (caldas)
    Omar Albornoz (tolima)
    Escojan (?)

        1. Listo, Omer lo dejamos entonces. No sera que de aqui a Junio 18 nos encontramos una «revelacion» de esos que lo obligan a llevar a una la pancarta el estadio diciendo: «Pekerman… «fulanito» es colombiano» y que le pongra presion al viejito pa’ la convocatoria pa’ ir al pais de gorros de peluche?

  6. Muy buen post Master,aunque le hubiese puesto más a Falcao y a Abel.
    El viejo tiene 8 meses para ir mirando los relevos de Cuadrado y Arias,que son un tanden de terror por la derecha.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *