Partidos, Partidotes y Partidazos: EL PARTIDO DEL SIGLO

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Este hermoso deporte le ha regalado partidos ultra emocionantes a quienes somos futboleros de ley. Ya sea cumpliendo rol de hincha o de neutral. Muchos de estos encuentros han pasado a la posteridad, pero hay uno que se jugó hace casi 50 años y se ganó el mote de “EL PARTIDO DEL SIGLO”. Sí, ese que tuvo lugar en el legendario Estadio Azteca de la Ciudad de México, entre las selecciones de Italia y Alemania por la semifinal del mundial de 1970. Pienso que en la sección de Partidazos de La Monserga del Futbol era menester hacerle un homenaje. Por consiguiente, tengan la bondad de acomodarse en la silla, decirle al que esté cerca que se calle la jeta y no moleste (especialmente si es su jefe), y acompáñenme a repasar lo que fue un partidazo de la P a la O; lleno de emoción, clase, calidad y FULL testosterona (aaaaaaaaaaaaaeeeeeee).

A estas alturas todos han de saber que Italia es una de las potencias futbolísticas. Aunque actualmente esté pasando por un momento atípico en su historia, siempre han estado en los primero planos. Yendo a casi todos los mundiales y habiendo alzado el trofeo 4 veces. Además, le han dado al mundo grandísimos jugadores y por muchos años tuvieron la mejor liga del planeta. Sin embargo, para quien suscribe, lo más destacable es lo que más se le ha criticado históricamente: la excesiva tendencia hacia el fútbol defensivo. O sea, a mucha gente le pasa que oye “selección de Italia” y se imagina a 9 perros dando pata, más un crack y un buen arquero. Que sacan los resultados jugando al contragolpe y colgado de los palos. Que cuando no pueden con fútbol, recurren a la maña… y como esas, mil huevonadas más. Ok, uno admite que Italia no suele jugar vistoso, pero si ha obtenido 4 mundiales entonces es efectivo y juega bien. ¿Y acaso el fútbol no se trata de eso? Ser fuertes en las 3 lineas (defensa, medio y ataque) y meter más goles que el rival. El que diga lo contario que juegue sin arcos… Por otra parte, para nadie es un secreto que los italianos tienen un hijo bobo y les salió Nazi (?). Es decir, no sólo le duplican el historial, sino que técnicamente no han perdido ningún partido importante frente a los germanos. De hecho, el único partido mata a mata donde los Azzuri acabaron con un sabor amargo fue la última Eurocopa donde los eliminaron por penales… Aunque para los leguleyos no fueron derrotados en los 90 minutos así que no cuenta (?).

Igual que Italia, Alemania es una potencia en este juego (como en casi todo). Tiene la misma cantidad de títulos mundiales y nunca ha sido eliminada en las clasificatorias, habiendo faltado a la copa del mundo sólo por asuntos políticos. En los mundiales hacen que incluso los brasileros tengan cierto resquemor si oyen su nombre.  Y los argentos ya hasta tendrán sueños húmedos con tipos tatuados con cruces esvásticas. Entonces, así las cosas, Alemania llega siempre de candidato a los mundiales y se comporta como tal… Hasta que se topa con Italia. Ahí derrapan más que Mockus en las elecciones presidenciales del 2010; viéndose perdedor en finales, semifinales, cuartos de finales, etc. Es tanta la paternidad de italianos para con alemanes que a uno le da sensación de que si Mussolini se le tuerce a tiempo a Hitler (?), los que hubiesen llegado boleando fierro y azarando la plaza a Berlín en abril de 1945 hubiesen sido los italianos, en vez del ejército Rojo.

¿Cómo llegaban los dos equipos?

Italia, que venía de ser campeona de Europa, compartió grupo con Uruguay, Suecia e Israel. Inició jugando contra los escandinavos a los que le ganó 1 a 0 con gol de Angelo Domenghini, para luego empatar a 0 con Charrúas y jabones Nifreretes. En cuartos de finales les tocó el local al que aplastaron con un 4 a 1 luego de empezar perdiendo. Goles del gran Gigi Riva y Gianni Rivera x2, más un autogol mexicano. De este modo avanzaban a Semis y esperaban a los teutones.

Alemania por su parte se había paseado en bolas por su grupo. Este fue conformado por Marruecos –al que le ganó 2-1 con Goles de Seeler y Muller-, Bulgaria –a quien le ganó 5-2 con goles de Libuda, Hat trick de Muller y Seeler- y Perú al que derrotó con otro hat trick del Bombardero Muller. Luego en cuartos enfrentó a Inglaterra, quien les empezó ganando 2 a 0, pero a punta de huevas remontaron el partido y el último gol fue obra nuevamente de Muller (qué capo este man) sellando el 3-2 definitivo (NdelaR: Este partido también da para post. Fue un partidazo de pe a pa). Y así recibiría a su padre Italia en Semifinales.

Sin el Saludo Nazi no es lo mismo

La previa del partido

Hagamos un breve repaso de quienes conformaban las titulares de ambas escuadras para ubicarnos más en el contexto.

ITALIA

Enrico Albertosi, Tarcisio Burgnich, Pierluigi Cera, Roberto Rosato, Giacinto Facchetti (C), Mario Bertini, Giancarlo De Sisti, Angelo Domenghini, Sandro Mazzola, Gigi Riva, Roberto Boninsegna. Entraron: Giovanni Rivera y Fabrizio Polleti. DT: Ferruccio Valcareggi.

Enrico Albertosi: Arquerazo. Se dice que es uno de los mejores porteros nacidos en la península itálica. Jugaba en el Cagliari en aquel momento donde era ídolo. Multicampeón con Fiorentina, Cagliari y Milan. Le ganó el puesto nada más y nada menos que al gran Dinno Zoff. Cuentan las crónicas que era un arquero bastante acrobático, de grandes reflejos y un carácter jodido. Puteador serial de rivales y compañeros (!) cuando las cosas no iban bien.

La cara de camorrero de este man…

Tarcisio Burgnich: Un central duro y recio, pero técnico. En la selección hacía las veces de lateral derecho. Le decían La Roca por su fortaleza. Impasable por arriba y por abajo. Bastante fuerte en el juego aéreo defensivo, pese a no ser muy alto. Poseía un carácter bastante fuerte y metía el guayo sin ningún resquemor. Mejor dicho, un defensa bien italiano. Jugaba en el Inter para la época.

Pierlugi Cera: Jugaba de líbero, de stopper, de lateral e incluso de 5. Era un jugador bastante consistente en su rendimiento y solía hacer un David Luis (?) e irse al ataque pero sin quedar como un huevón. También jugaba en el Cagliari en aquel momento.

Roberto Rosato: Le decían el “Cara de ángel” (!), pero dentro de la cancha era un demonio. Bastante recio, agresivo y mañoso. Tampoco era tan alto pero sobresalía mucho por su juego aéreo defensivo. En esos tiempos jugaba con las locas de el Milán.

Giacinto Facchetti: Cuentan las crónicas que es de los mejores laterales izquierdo de la historia. Fuertísimo en defensa, imparable en ataque, guapo, ganador y goleador. ¿Qué más le pide uno a un jugador así? Ah, claro, líder dentro y fuera de la cancha. Un crack. Jugaba en el Inter donde tiene hasta estatua.

Mario Bertini: El Wilmar Barrios del equipo (?). Volante recuperador de gran sacrificio y carácter, pero con muy buen pie. También jugaba de central y se destacaba. Le hacía relevos hasta a Valcareggi. Un jugador muy importante en el esquema del equipo. Vestía la camiseta del Inter en esa época.

Giancarlo De Sisti: Volante rápido y de muy buen pie, muy querido en la Roma y en la Fiorentina (donde andaba en tal momento). Jugaba muy bien tanto por dentro como por fuera y podía jugar de volante mixto (así era usado en la selección) o de vocación netamente ofensiva. Poseía gran visión de campo, conducción, pasegol, pero su mejor virtud era el despliegue físico y la rapidez. Por esto último era apodado “El trompo”.

«Sonría para la foto»

Angelo Domenghini: Jugador completo que podía desempeñarse de wing, mixto, segundo delantero o hasta 9 de área. De gran visión de campo y despliegue, fuerte en los mano a mano y un tremendo olfato de gol. En la selección jugaba por la izquierda, asociándose con el resto del bloque ofensivo. Era el #7 del Cagliari.

Sandro Mazzola: Acá hablamos de uno de los mejores jugadores no sólo de la República Italiana sino de la Europa misma. Multicampeón con Inter de TODO. Se desempeñó en todas las facetas del ataque, aunque en la selección jugaba como un 10 neto. Ganador, temperamental, con clase, visión de campo, gol, etc. Mejor dicho, UN TREMENDO CRACK. Solamente jugó en Inter en toda su carrera futbolística.

Gigi Riva: El goleador histórico de la Azzurra. Jugaba de delantero por fuera o por el medio. Llegó siendo el goleador de la liga italiana y la referencia del ataque de su equipo. Era un delantero extremadamente completo y muy difícil de marcar, puesto que hacía daño por arriba, por abajo, metía unas diagonales tremendas, era fuerte, temperamental, manejaba ambos perfiles, se asociaba bien. En resumidas cuentas UN CRACK ABSOLUTO. Es el máximo ídolo del Cagliari.

 

Roberto Boninsegna: Delantero incansable que aquel momento jugaba en el Inter. Oportunista, ágil, técnico, con excelente juego aéreo y un fino olfato goleador. Otro de carácter jodido tanto dentro como fuera de la cancha. Mantuvo una relación tirante con Valcareggi.

Tarcisio Burgnich, Roberto Bonisegna y Gigi Riva brindando con micheladas (?) el paso a semifinales

Gianni Rivera: Era el primer recambio del equipo. Estamos hablando de ooootro crack impresionante. La única razón por la que éste tipo no era titular es porque jugaba en la misma posición de Mazzola; y Valcareggi, poniéndose en modo Bielsa 30 años antes, decía que estos NO podían jugar juntos. Por lo cual, Jugaba Mazzola un tiempo y Rivera el otro (!)… Era un jugador elegante, con visión de campo y asistencia. Era el cerebro de Milan, en sus pies se gestaban todas las jugadas de gol de su equipo.

Mazzola y Rivera. Cracks

 
Fabrizio Polleti: Defensa central del Torino. Pieza fundamental de su equipo, solía ser el primer recambio de la defensa azzurra.

ALEMANIA

Sepp Maier, Karl-Heinz Schnellinger, Franz Beckenbauer, Willi Schulz, Berti Vogts, Bernd Patzke, Wolfgang Overath, Uwe Seeler (C), Gerd Mueller, Hennes Loehr, Jurgen Grabowski. Entraron: Sigfried Held y Reinhard Libuda. DT: Helmut Schön.

Sepp Maier: Legendario arquero teutón. Multicampeón con el Bayern, equipo donde sólo jugó. De gran carácter y ubicación. Top 5 de arqueros en su época.

Berti Vogts: Lateral derecho incansable, metedor y de buen pie. Le decían “El Terrier” (perro de caza alemán, maldito ignorante) porque peleaba cada pelota como si fuera la última. Era jugador e ídolo del Borussia Mönchengladbach.

Karl-Heinz Schnellinger: Defensor duro, dinámico y de muy buen pie. Era el otro crack de la zaga. Con mentalidad ganadora y exitoso tanto en Alemania como en el exterior. Jugaba en el Milan en aquella época donde ya había ganado todo siendo titular inamovible.

Rivales en sus selecciones. Compañeros en el Milan.

Franz Beckenbauer: Éste no tiene presentación, ¿no? Uno de los 3 mejores centrales de la historia. Jugaba en el Bayern.

Willi Schulz: Defensor central fuerte en el mano a mano, pero conservador. Un buen ladero para cualquiera. Jugaba en el Hamburger SV.

Bernd Patzke: Otro buen complemento de la saga alemana. Jugaba en el Hertha Berlin.

Wolfgang Overath: Jugador zurdo elegante, de buen pie, pero con gran despliege físico y gol. Era uno de los cracks de la selección, donde era usado como una especie de mixto, ayudando a sacar al equipo de abajo y gestando a su vez sociedades con el resto de atacantes. Sólo jugó en el Köln FC donde es uno de los máximos ídolos.

Aun con esa cara de servidor público era un jugadorazo

Jurgen Grabowski: Jugaba de wing derecho o centro delantero. Rápido y ágil, con gran fortaleza en el uno contra uno. Sólo jugó en el Eintracht Frankfurt.

Hennes Loehr: Jugaba de win izquierdo o centro delantero. Gran explosión por su banda y olfato de gol. Jugó en el Köln FC la mayor parte de su carrera.

Uwe Seeler: Para ser bajo de estatura (sobre todo en parámetros alemanes) era un centro delantero infernal. Oportunista, técnico, con excelente juego aéreo, líder y ganador. Era el capitán de la selección, por encima de Beckenbauer. Otro de los cracks del equipo.

Gerd Mueller: Tampoco tiene presentación a estas alturas. Por 40 años fue el goleador de los mundiales. Es el goleador de la Bundesliga y el goleador histórico del Bayern Munich. Nada más…CRACK.

Reinhard Libuda: Delantero o wing derecho. Entraba cuando las papas quemaban, para explotar a banda, tirar centros y/o reportarse con gol. Jugaba en el Shalke 04 donde es una leyenda.

Se acabaron los chistes nazis.

Sigfried Held: Volante ofensivo o delantero en ocasiones. De mucha técnica y visión de campo. Otro de los recambios frecuentes, jugaba en el Borussia Dortmund en aquel momento.

Como ven, Italia tenía un com-ba-zo. Cuya base eran el Cagliari y el Inter, campeón y subcampeón respectivamente del Calcio esa temporada. Sin embargo, Alemania no se quedaba atrás. Ambos tenían jugadorazos como para garantizar un encuentro deslumbrador. Aunque para quien escribe, Italia ganaba libra por libra. Con poco margen, pero ganaba. Pese a esto, la prenzzzzzzzzzza espezzzzzzzializzzzzzzzzada daba como ganador a Alemania dizque por su constancia y regularidad en el campeonato… Y bueno, ver periosidas errándole a los pronósticos es más común que el uribismo en el Carmen de Bolívar. Porque, como cosa rara, no estaban teniendo en cuenta que ya la paternidad estaba afirmada: de 13 partidos disputados, 8 habían ganado los italianos y solamente dos perdidos más 3 empates. Pero vayamos a lo concreto…

«Mira la telecamara, figlio». «Prepara el culën, langarutën».

Comienza el partido

Desde el primer minuto Alemania se mostró afín a tocar la pelota, pero sin eficiencia en la profundidad, incluso se veía incómoda en el mediocampo. Mientras que Italia se arrimaba al área contraria con más pericia y juego asociado. Y es que en Alemania el único que mostraba algo de ingenio era el gran Overath, pero sus compañeros aún no estaban en el partido. No obastante, ya en Italia habían empezado los circuitos con Mazzola-Fachetti y De Sisti-Domenghini, ambos derivados en Boninsegna y/o Riva. Tanto que así cayó el primer gol: Sacan de lateral y se la dan a De Sisti, quien tiene tiempo de transportar y mete un pase raso para Boninsegna quien retrocede para recibir, se voltea (con bastante facilidad), da un pase a Riva que anticipa Berti Vogts, pero le queda el rebote al mismo Boninsegna el cual zampa un zurdazo pegado al palo derecho del arquero imposible de atajar. De este modo se iba a Italia arriba a los 8 minutos del juego. Los alemanes recibieron el mazazo pero no se despertaban del todo, Italia por su parte seguía tocando y dominando el encuentro; abriendo las bandas y centralizando el juego a su antojo. Empezó a Surgir la figura de Domenghini para mostarse por la banda derecha y explotarla. ¿Alemania? Bien gracias. Los únicos que intentaba algo eran Overath y Muller (este último dándose de lo lindo con Cera y Rosato), los demás estaban afectados por el sol y el smog defeño (?). A los 15 minutos, De Sisti se junta con Burgnich y recibe un pase al vacío el cual controla y engancha a Schnellinger para irse en busca del área riva; pero este último, haciéndole una clara falta, lo tumba evitando sus intenciones. En seguida, Alemania se arma y se prepara para contragolpear iniciando la jugada con Lohr, quien toca a Beckenbauer y este a su vez toca con Seeler, quien se la devuelve en pleno centro del campo. Y ahí el Kaiser empieza a demostrar porque es uno de los mejores jugadores de todos los tiempos: avanza rápido por el centro del campo y se lleva a punta de velocidad y potencia a dos jugadores italianos, entrando al área con propiedad se dispone a patear pero es derribado por Fachetti en última instancia. Un claro penal que huele a compensación por no cobrar la falta a favor de Italia 30 segundos antes. A partir de ese momento, toda Alemania se despertó y empezó a pelear el partido en serio. A los 20 minutos se vio la primera jugada colectiva alemana que deriva en el área azzura: Overath arranca en su campo por el medio, se saca a dos jugadores italianos, la toca a Beckenbauer que anbaba por derecha, éste transporta avanzando y se la da al movedizo Muller que retrocede para recibir pero enseguida se voltea y se la pasa a Vogts que venía entrando solo por al lado pero patea mal. Y se equilibra el partido empezando un espectacular ida y vuelta.

Los de arriba celebrando el gol de Boninegna

A los 25 minutos se juntan Domenghini, Mazzola, Boningsega y Riva para llegar al área rival de derecha a izquierda lo cual termina con éste último metiendo un taponazo un poco desviado pero tan fuerte que terminó desinflando el balón (!). Alemania responde intentando llevar peligro, pero son jugadas inofensivas para la saga italiana, mientras que los Mussolini boys tocan y llegan al último cuarto de cancha con más profunidad y facilidad. Hasta ahora no se ve la figura de Mazzola en su esplendor, sin embargo los restantes del bloque ofensivo corren, meten y juegan para compensar esto. A su vez, en Alemania sólo aparecen Overath y El Kaiser Beckenbauer para generar alguiiiito de peligro, los demás están más neutralizados que el golpe de estado de Guaidó en Venezuela. Sin embargo, a los 28 minutos, Overtath agarra una pelota en el último cuarto de cancha azzuro y le pega un zurdazo que despeja Rosato, le queda a Lohr por la izquierda quien la vuelve a meter al área, cayéndole la pelota Muller el cual habilita enseguida a Seeler dejándolo en posición iniminente de gol, pero Bertini lo anticipa y manda la pelota al corner. Una jugada que sube la moral alemana, puesto que de la mano de Wolfgang Overath (qué jugadorazo, tienen que verlo en acción. Está en TODAS) se empiezan a venir con todo. Este mismo recibe una recuperación de pelota en cancha italiana se la pasa a Schnellinger, el cual dispara al arco pero rebota en un italiano y Muller agarrando el rebote, le pega un zurdazo de volea que pasa cerca del arco.

Ya iba la primera media hora del juego y Alemania seguía en búsqueda del empate. Lohr y Grabowski empezaron a aparecer y a juntarse con Overath quien dirigía la orquesta desde más atrás. Italia por su parte, había cedido la pelota y el mediocampo. No se veía ni De Sisti, ni Domenguini y mucho menos Mazzola. A los delanteros Riva y Boninsegna no les llegaba la pelota; por lo tanto sólo quedaba la línea defensiva para aguantar. Así las cosas hasta que Beckenbauer recibe en el medio, dribla a un jugador y se la toca a Vogts quien avanza y le da la pelota a Grabowski para que éste cambie de ritmo rápidamente y le pegue un taponazo de zurda al arco que Albertosi rozó con los dedos mandando al tiro de esquina.

Italia responde con una jugada entre Mazzola y Bertini que terminó en otro tiro de esquina el cual fue mal ejecutado por los tanos. A continuación, Alemania lleva peligro a Italia al avanzar tocando y luego metiendo la pelota al arco para Muller, pero el arquero Albertossi sale y despeja la pelota con los puños. Italia quería volver a juntar sus mejores fichas, aunque la defensa y la volante alemana no lo permitían. Peor aún, los germanos sí se asociaban bien en ataque y llegaban al área a través de centros y tiros de media distancia. A los 40 minutos, Alemania dilapida un tiro libre cercano, en los pies de Grabowski. Italia responde con un tiro libre lejano luego de que bajaran a Boninsegna, metiendo un centro para Riva que cabecea mal. Dos minutos después, luego de un tiro de media distancia de Seeler que se fue a las nubes, Albertosi saca desde su arco, Domenghini peina para Boninsegna quien baja la pelota habilitando a Riva, Patske anticipa aunque deja la pelota a Riva, pero esta vez Vogts se interpone cabeceando a su propio arco (!) por lo que Maier tiene que manotear la pelota generando otro tiro de esquina. Y con esto revivió Italia quien empezó a tocar de nuevo, apareciendo los tándem Domenghini-Mazzola-Riva-Boningsegna. Tanto que en una jugada del medio hacia la derecha, Recibe Boninsegna, dribla a su marcador y mete cipote de pase al vacío para Mazzola que controla en carrera pero no puede definir bien. Luego en un tiro libre a favor de Italia le queda el rebote a Bertini que dipara a las manos del arquero. Éste se pone a mariquear (?) con la pelota y le cobran tiro indirecto dentro del área, que no es siquiera reclamado por ningún alemán, pero que es desperdiciado por Italia. Y así finaliza el primer tiempo…

Segundo Tiempo

Comienza con un pase al vacío para Patzke que anticipa Cera. Poco a poco va apareciendo Gianni Rivera para darle fútbol y refrescar al mediocampo, puesto que  había reemplazado a Mazzola (de muy mal partido) desde el inicio de la parte complementaria. Sin embargo, es Alemania quien a los 48 minutos llega al arco rival con una jugada gestada entre Overath, Beckenbauer y Seeler, el cual recibe un pase bombeado del Kaiser que no es anticipado por su marcador pero dispara rastrero a las manos de Albertosi. Los tanos responden al minuto con un saque largo del arquero que es cabeceado por Shults y le queda al Kaiser. Éste se la pasa a Overath (es el que más la pide) quien, intentando sacar a su equipo con elegancia, busca y se la toca a Grabowski para que siga avanzando, pero no. Grabowski en vez de eso la devuelve dejándola corta y la pelota es robada por Domenghini el cual arranca a correr llegando a último cuarto de cancha alemán, lanzando un centro para que Riva cabecee de palomita pero el arquero logra contener el tiro. En seguida Alemania se va a la carga con un centro de Schnellinger que Seeler dispara de chilena pero se va desviado.

Si bien el partido se había tornado de “toma y dame” en poco tiempo, se notaba que faltaba más profundidad en ambas escuadras. Es por eso que el Dt alemán manda a la cancha a Reinhard Libuda (por Hannes Löhr) para que haga la banda y tire centros. Y empieza a ser referencia ofensiva de inmediato: sus compañeros saben que, no sólo está fresco, sino que es muy bueno explorando los costados. Por lo pronto se ubica por derecha y desde ahí empiezan a juntarse El Kaiser, Overath y Libuda para llevar peligro. En un toque-toque donde participan los 3 más Muller, le queda una pelota cerca al área a Overath y el zurdo le pega al arco un poco desviado. De igual modo, Rivera empieza medio a aparecer. Tanto que él mismo se roba una pelota en la mitad de la cancha cuando Alemania pretendía salir y avanza sólo en velocidad llegando al borde del área e intentando acomodarla, le pega suave al balón. Italia en seguida vuelve acercarse porque De Sisti se está metiendo en el partido de nuevo y aporta recuperación y asocio.

El partido continúa en la misma tónica, hasta que Muller es derribado cerca al borde del área italiana generando un tiro libre. Los italianos se distraen armando la barrera y Beckenbauer, que era tan vivo como crack, cobra a riesgo dejando solo a Grabowski en posición de gol pero nuevamente patean mal frente al arco. Siguen los alemanes intentando empatar y los italianos aumentar con Rivera que solo aporta chispazos en el partido. Al mismo tiempo Libuda se empieza a tornar incontrolable por la derecha, tanto que se inventa un globito que hizo exigir a Albertosi, mandándolo al tiro de esquina. Alemania sigue presionando y ya no deja salir a Italia; esta vez es Bertini, quien asfixiado por la marca de Seeler y Grabowski, tira la pelota hacia atrás buscando al arquero. El balón le queda corto llegando a los pies de Muller, muy cerca a la 5 con 50 (!). Y aunque Albertosi le puntea el balón tirándose en plancha, le queda a Grabowski que empieza a entrar al área desde la banda lateral derecha italiana, invitando a un mano a mano a sus marcadores. Pero de manera rápida e ingeniosa se le pasa al bueno de Overath, que entrando al área en velocidad zampa un CIPOTE DE TRAMACAZO haciendo estremecer el travesaño. Sin lugar a dudas le ganaron las ansias ¡Iba a ser un golazo!… A esa altura se veía mucho mejor Alemania que vueeeeelve a la carga. Esta vez por el costado de Libuda (entró enchufadísimo) luego de que Karl-Heinz Schnellinger gane una pelota aérea, se la dé a Libuda, quien se la devuelve haciéndolo correr por la derecha. El bueno de Karl se la pasa a Beckenbauer y vomitando calidad (?) se lleva a a 2 italianos a punta de potencia y clase pero el último lo derriba MUY CERCA al área pareciendo penal, pero al final cobran tiro libre (que es desperdiciado nuevamente). Alemania peloteaba a Italia fieramente y hay algo que puede apreciarse notoriamente: Por mucho Rivera o Mazzola que tengan encargada la dirección de la orquesta, el termostato del equipo es Giancarlo De Sisti. Cuando él aparece, Italia no sólo respira, sino que lleva full peligro al arco nazi. Pero cuando se pierde, su equipo cede mucho terreno en el medio que es aprovechado por Benckenbauer y Overath para darle rienda suelta al ingenio futbolístico. De hecho, el mismo Overath (NdelaR: Espero que estén viendo los links. No se pierdan de admirar a ese tipo) se inventa una jugada en el 3er cuarto de cancha sacándose a su marcador y avanzando con cabeza levantada y driblando a su otro marcador, asiste de manera fenomenal a Grabowski. Este último le pega un fierrazo que se metía al arco pero Rosato sacó de la línea (!), quedándole a Seeler frente al arco pero no logra acomodarse para pegarle porque es derribado por Bertini (PENALAZO), aunque le queda a Muller también y éste se apura enviando la bola a las nubes.

Penal

Alemania sigue bombardeando e Italia aguantando. A través de centros, tiros libres, toques, disparos de media distancia, etc. Alemania llega al área rival. Sin embargo la saga azzurra está a la altura de las circunstancias. Por su parte, los volantes italianos están más perdidos que la que hacía de Daniela en “Padres e Hijos”: sólo corren de un lado a otro, viendo tocar a los panzers que «merecían» el empate desde hace rato… Ya van 75 minutos y Los Tanos ni contragolpean. En tanto que Alemania llega con mucha gente al arco contrario, sin finalizar bien las jugadas. Pero eso sí, va por los costados, por el centro, por arriba, por abajo. De vez en cuando se animan los italianos, pero con unos ataques más esteríles que Simón Bolívar. Increíblemente Italia entró en una obnubilación peor que la del América de Lara en su segundo semestre, y es tan profundo que hasta el arquero (que venía siendo figura) se mandó una jugada bejaranezca pegándole a Sigfrield Held (había reemplazado a Patske 18 min antes) en la costillas cuando se disponía a sacar de arco, quedando la pelota en la línea con el animal de Muller por ahí cerca. Eso sí, cayó en cuenta de que iba a ser una jugada legendariamente imbécil y corrió tan rápido que llegó primero que el delantero alemán para alejar la pelota de su arco. Italia lucía embotada y embotellada, Alemanía ya estaba a “matar o morir”. Italia llegó nuevamente con un cabezazo de Riva a las manos de Maier. Nada más. Mientras que Libuda se seguía haciendo una fiesta por el costado derecho; si no conseguía meter el centro era porque lo bajaban con falta.

Qué ganas de bejaranearla toda

Los balones caían y caían como gotas de lluvia al área de los compatriotas de Mario Bros. Pero afortunadamente entre el arquero y los centrales estaban frenteando el corte de buena manera, hasta que tanto va el agua al cántaro que… Held pelea una pelota por el costado izquierdo, pero Burgnich se la quita y la manda al lateral. El mencionado alemán se aviva y saca rápido dándosela a Grabowski, quien controla y pelea la pelota con su marcador saliendo victorioso. Mete el centro y equivocándose la saga italiana como pocas veces sucedió en el partido, dejan solo a Schnellinger que, proyectado cual 9 de área, la manda a guardar faltando 2 minutos para el final (técnicamente iban 91 de juego y eran sólo 3 de reposición). Júbilo alemán como cuando invadieron Yugoslavia por el premio del empate, pero esto sólo comenzaba…

Schnellinger celebrando agotadísimo y celebrando con el cielo

 

 Empieza lo mejor

Empezaba el tiempo extra y Libuda seguía en modo Mbappe (?), explotando la banda y metiendo centros picantes. Esta vez cabeceó Muller y Albertosi mandó al corner. El partido continuaba del mismo modo e Italia no encontraba el rumbo. A los 93 minutos, Beckenbauer -ya estaba jugando con el cabestrillo en el brazo derecho- abre para Sigfried Held, el cual desborda por la izquieda y lanza un centro que tenía a Libuda como destino pero es anticipado por Fachetti, generando otro tiro de esquina. De esto último llega el centro por parte del mismo Libuda, que es cabeceado por Seeler y tanto el arquero Albertosi como Fabrizio Polleti (reemplazó a Rosato en tiempo de reposición) fueron el mar de dudas que tanto necesitaba Muller y anticipó a ambos para empujar la pelota a la red. Gol alemán y para nada increíble. Es más, si se quiere, era un justo resultado.

Venir a darle tremenda papaya a ese man

Pese al mazazo de encontrarse ahora abajo, Italia nada que despertaba. De hecho, Alemania seguía encontrando espacios en jugadas colectivas e individuales. Hasta que en un saque desde el arco, derriban a Boninsegna en territorio teutón pero lejos del área. Rivera cobra para Italia direccionando la pelota el punto penal donde se encontraba Burgnich, esta lo sobra pero pega en el pecho de su marcador (Held) y le queda servidita para que el italiano la mande al fondo de la red. Italia igualaba 2 a 2 y este SÍ era un resultado “injusto” en aquel momento, puesto que se encontraba un gol de la nada y sin hacer mucho mérito. Luego de eso, la Azzurra seguía en lo mismo: puros ataques estériles. Por otra parte, los alemanes se notaban con ganas de irse arriba de nuevo aunque bastante desesperados. Grabowski, Overath, Held y Libuda continuaban generando fútbol, mientras que su rival aguantaba y salía de contragolpe. Sin embargo, esta vez empezaría a ser diferente, ya que en medio del mencionado desespero, dejaban a Beckenbauer sólo en la mitad de la cancha. Para rematar, el Kaiser no se encontraba en plenas condiciones físicas por su brazo derecho.  Y así nacería la jugada del 3er gol italiano: Alemania intenta atacar por medio de Libuda que avanza en terreno italiano, pero al encarar a Riva finge una falta (sin haber necesidad) que el árbitro no compra, Italia sale rápido bajo la batuta de Rivera (por fin) quien recorre parte del terreno sin que nadie siquiera lo estorbe y asiste a Domenghini. Éste sin pausar mete un pase aéreo a Riva, quien controla magistralmente y dribla al zaguero alemán y le pega de zurda acomodando la pelota al palo derecho del arquero. GOOLAZO como para guardarlo en los anales del contragolpeo. Alemania estaba en modo equipo-de-guardiola, pasando la pelota de un lado a otro, pero Italia con 3 toques le desarmo la defensa y se ponía arriba. Y al minuto se acaba el primer tiempo suplementario, con los alemanes aún saliendo del mazazo y los italianos agarrando un poco de moral.

En el segundo tiempo suplementario, Italia cogió vuelo de nuevo. Revivieron las figuras de De Sisti y Domenghini, generando juego como en el primer tiempo. No obstante los germanos seguían empeñados en empatar. Ergo, empezaba el “toma y dame” una vez más. Alemania volvía a recurrir a los desbordes de Libuda por derecha y Grabowski por izquierda, puesto Overath a esa altura se había deshecho de tanto correr y Beckenbauer, por muchas huevas que pusiera, estaba lastimado físicamente. A los 108 minutos, Fachetti mete una pelota bombeada al área alemana en busca de Riva, pero es contenido por Berti Vogts, el cual se la da a Held, cuya aceleración causa estragos en el mediocampo italiano y mete un pase al vacío a Muller pero entre Burgnich y Albertosi neutralizan el ataque. Aunque este último, encaprichado con mandarse una cagada sí o sí, le tira la pelota a Polleti sin que éste esté mirando, pegándole en la espalda con el balón. En seguida Muller se aviva y gana la pelota, pero es tumbado fuera del área por el mismo Albertosi. Otro tiro libre peligroso a favor de Alemania que cobra Overath y cabecea Seeler contra el piso pero salva el arquero generando oootro corner. Los alemanes deciden cobrarlo a riesgo y meten un centro para Seeler que NUEVAMENTE le gana el cabezazo a su marcador quedándole la pelota en bajada a Muller que la mete al arco de cabeza igualmente. GOL del bombardero que vuelve a anticipar a medio mundo para empatar el partido.

 

Der Bomber der Nation

Saca Italia y enseguida mueven la pelota para arriba: Fachetti le mete un pase bombeado a Boningsena, quien estaba por el costado izquierdo y le gana la zona a su marcador (Shultz) y se va hacia el área germana metiendo un tremendo pase de la muerte que le queda a Rivera en lo que fue una especie de penal en movimiento. El bueno de Gianni, que igual que Mazzola tuvo un partido bastante discreto, solamente tuvo que acomodar la pelota a uno de los palos para mandarla a guardar. Y con éste gol todo pasaba a ser 4-3 a favor de Italia. A partir de ese momento no hubo nada rescatable: Alemania fue a la carga, aunque esta vez sin profundidad. Quizás producto del cansancio, quizá producto de la incredulidad, pero lo cierto es que Italia no volvió a ser penetrada. Resultando todo en ataques tipo las trompadas al aire de Caruso Lombardi.

Rivera sella el 4 a 3 definitivo

Conclusiones

Decir que Alemania jugó mejor que Italia sería mentir, puesto que hubo un tiempo para cada uno, sin lugar a dudas. Además cuando los ítalos estuvieron arriba cedieron la pelota a Alemania que por lo general finalizó mal las jugadas. Pero cuando se vieron abajo en el resultado salieron al ataque y sin tanta maricada hicieron daño. Encima, cuando les tocó aguantar, su bloque defensivo y su arquero estuvieron a la altura de las circunstancias en la gran mayoría del encuentro. Die Mannschaft tuvo más la pelota en el segundo tiempo y tuvo su premio empatando el partido en el ÚNICO descuido posicional de la defensa italiana, sin embargo también tuvo mala suerte con esa lesión de Beckenbauer quien a pesar de seguir jugando con el cabestrillo mostrando unas huevas ASÍ de grandes, se notaba que le costaba equilibrarse al dominar la pelota.

Y de este modo Italia pasaría a la final, donde sería violada serialmente por la mejor selección de todos los tiempos. Por su parte Alemania jugaría por el 3er puesto, donde derrotaría a su similar de Uruguay 1 a 0 con gol del GRAN Overath.

Las Figuras

Por el lado de Alemania: Wolfgang Overath, Muller y Beckenbauer. Especialmente el primero. Qué jugadorazo. Confieso que no lo tenía visto.

Por el lado de Italia: Los dos centrales, Albertosi y el metedor incansable Boningsegna. Mención especial para Giancarlo De Sisti.

3 pensamientos sobre “Partidos, Partidotes y Partidazos: EL PARTIDO DEL SIGLO

  1. Postazo joven Yorch, as usual. De solo ver ese compacto resulta agotador verlos fajarse a tiros y en físico al puro sol y en la altura tan hp del DF. Irreprochable lo de ambos, aunque al final ese desgaste le terminó sirviendo en buena medida el título en bandeja de plata a los brazucas.
    Carajo, jugaba mucho Overath. Siempre es distinto verlo por uno mismo a quedarse con las referencias. Menos mal se hizo justicia con el man cuatro años después y con buena parte de los que jugaron ese partido. No tenía dateado a Libuda. Mucha culebra el tipo.
    Esa Italia curiosamente era de las de mejor pie en su historia sin sacrificar el Catenaccio, pero se la comieron los egos. Tengo entendido que la razón por la cual Gianni Rivera banqueaba era porque Luigi Riva lo vetó del equipo, y al ser él quien arrastraba masas porque «jugador del pueblo en equipo chico» no hubo forma de que Valcareggi objetara eso. Imagino que eso motivó sus declaraciones proto-Marcelo Bielsa.

  2. Que hp texto, pana. Me tomé el tiempo para leerlo completo y no dejo de aplaudirlo. Son muchos los partidos que uno tiene una idea preconcebida y que al verlos de nuevo no son tan así. Algo debía tener esta Italia que fue campeona europea dos años antes, y este partido lo demuestra, según se lee en tu texto.

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