Diez escudos feos/raros/pintorescos del fútbol mundial, sí, diez – Vol I

¿Alguno de ustedes se hizo hincha de su equipo solamente porque le tramó su escudo? Habrán casos, seguramente, de gente cuyo amor por la heráldica (?) es tal que desde chiquito vio – por decir algo – el escudo del Cortuluá y pensó «¡Ufff, yo de un equipo que tiene tal blasonar predominante de azur como fondo de un corazón alveolar con lambrequinado rampante de votivo escarlata, me hago hincha!«. Pero me atrevo a pensar que son aisladas excepciones, y que la grandísima mayoría de enfermos como nosotros nos hacemos hinchas del equipo por factores muy diferentes a las cualidades estéticas del escudo; y al que solo después le agarramos cariño/amor/adoración/fanatismo por pura decantación. Ya uno como hincha no le importa si el escudo de su equipo es un punto negro en fondo blanco o un festival de águilas, caballeros y montañas con ríos desbordantes en meandros gráciles irrigando un valle límpido y reluciente bajo el ardiente sol estival. El escudo se quiere y punto.

¿Qué hay en un escudo de un club de fútbol? Puede haber detalles provenientes de siglos de historia de la región o país, o situaciones apuradas de una tarde en la que dos tipos estresados se decían «¡Marica, dale rápido, que en diez minutos tenemos que presentar el escudo!». Yo prefiero pensar que detrás del escudo del mío hay una historía ancestral relacionada con nobles arrieros orgullosos que se inspiraron en el brillo del sol al despuntar en el horizonte sobre las montañas de Antioquia, pero al final si me dicen que fue un invento de la señora desocupada del dueño de la tienda de la esquina de donde se fundó el club, me importa un culo: la mística se la da mi equipo al escudo, no al revés. Pero convengamos que hay casos en donde a uno como hincha honestamente le daría por el revisionismo histórico (?) con el escudo de su propio club, sea por que este es raro, feo, rocambolesco, inexplicable o sensualmente inquietante (?). Como estos ejemplos que vamos a reseñar en el presente post – escogidos al azar por nuestro Departamento de Diseño Gráfico y Diagramación -, los cuales no sabemos sí son los más feos del mundo pero que a nuestro juicio le hacen muchas ganas para entrar en el top.

FC Santa Claus (Finlandia)

El día que Maria Angélica Mallarino quiera montar otra obra navideña para niños menores de seis años ya tiene con qué inspirarse: el escudo de este club de la ciudad finlandesa de Rovaniemi, capital de Laponia, en pleno Círculo Polar Ártico. Los fundadores del club (producto de la fusión, o en este caso sería más bien la solución sólida (?) de dos equipos de la ciudad) decidieron escoger como símbolo no un oso polar, ni tan siquiera la reina de las nieves (?), sino al viejo y querido Papá Noel. Pero para rematar no se agarraron del rupestre y antihigiénico San Nicolás sino del Santa Claus yanqui, viejito bonachón y cheverón al que solo le falta la botella de Coca Cola en la mano. Probablemente es por tal razón que el club finlandés no ha pasado de la Segunda División local, pues con un escudo tan poco agresivo no se motiva ni un paraguayo cercado por brasileños en el Chaco Boreal. Al menos invéntenle un pasado de inquisidor, no sé, algo que motive más… Se aplaude la originalidá pero se pasaron de cipayos con el Santa Claus…

Hamburgo S.V. (Alemania)

Al viejo y prestigioso club alemán pareciera que le diseñó el escudo la escuela de Bauhaus (?). Pero no: su origen está relacionado con la fuerte tradición marinera del puerto alemán: dice la leyenda que los fundadores del equipo se inspiraron en una bandera marítima llamada Blauer Peter que «… era izada por los barcos cuando estaban listos para zarpar con el fin de avisar a los pasajeros». Clarito. Está bien que este escudo representa un adelanto notable respecto de la bandera que la inspiró, pero se hubieran esmerado en dar algo más de sí… Al menos el escudo tiene el mérito del minimalismo (?) y de ser extremadamente friendly para que los niños la dibujen en sus cuadernos escolares. Y también es perfecto para usar en corbatas, manteles, sofás o cubrelechos sin que la señora de uno le diga «¡Ajjj, me vas a volver loca con todas esas cosas de tu tal equipo de fútbol por todos lados!»

Calais Racing Union (Francia)

Ah, bue… parece que pegó fuerte en Francia la tradición de los Barbapapá. El club fundado en 1974 en la ciudad norteña de Calais adoptó para su escudo un baloncito pelirrojo (!) con ojos picarones que miran traviesamente al pateador, como diciéndole «¡Hola, amiguito! ¿Me quieres patear? Anda, patéame, ¡¡¡ Juguemos juntos, chaval!!!«. Te digo que a mí me mira un balón así y lo revoleo a la mierda más que Davi Rancan a una pelota rondando el área del DIM en 2011. No sé qué tanto ha invertido el club en jugadores, instalaciones, entrenadores o logística, pero pensamos que sí debería guardar algunos euros para mandar a actualizar el logo, que huele terriblemente a programas infantiles de los años setenta.

Bangkok Glass (Tailandia)

No sabemos cómo serán los conejos en Tailandia, pero si son así como los del escudo de este club de Bangkok no voy por allá ni por el recontraputas. Imagínate que estés caminando por una playa de ese país, buscando cruzar a nado el océano en busca de una isla en la que viva una comunidad autónoma de neohipsters europeos – los cuales están en pacífica convivencia con una banda productora de marihuana -, en la que habrá una sensual francesa a la que te vas a comer una noche de luna llena en una laguna… y cuando vas pensando todo eso te sale de entre los arbustos un conejo de cabeza alargada, ojos de secuaz tailandés malo de película de Van Damme y mirada asesina… ME CA GO. La otra posibilidad, considerando el nombre del club, es que sea un vaso de vidrio en forma de conejo, pero sinceramente prefiero la posibilidad del conejo mutante…

Club Polideportivo Ejido (España)

Lo que sí hay que reconocerle a los creadores del escudo del recientemente desaparecido club andaluz es que fueron consecuentes con el nombre del mismo. Pero sí fueron muy obtusos en la escogencia de la forma geométrica del escudo: el triángulo invertido isósceles (?) dificulta la yuxtaposición de los deportes representados, a saber: fútbol, tenis, basketball, gimnasia (por las barras laterales, supongo… a menos que sea algún oscuro deporte andaluz), arrojamiento de balones medicinales (?) y  siembra de tomates, pimentones y coliflores. Se les escapó el borrico (?) al no incluir a un equipo de montañistas para representar el alpinismo, ni un río con canoas caóticamente distribuídas para mostrar el canopy. Parece que de tanto afán de querer hacerlo todo al final hizo que descuidaran las finanzas del club, y mira lo que pasó…

Limon F.C. (Costa Rica)

De por sí debe ser jodido ser hincha de un club con nombre tan amargo (?); ahora imagínate haciéndole fuerza y defender a muerte los trapos de este escudo con color papitas-de-limón, un slogan más afín de orquesta de música tropical de matrimonios que de un equipo de fútbol («…y ahora, la orquesta más candente de la Costa, ¡¡¡LA TROMBA DEL CARIBEEEEEE!!!«), y para rematar coronado con el dibujo de Huraquín la Tormenta futbolera. Del nombre del club no tiene la culpa sino la ciudad, pero tampoco era para seguirle la corriente con tanto detalle folclórico. De por sí el color verde es bien feo (?), ahora si le añades todos estos detalles adicionales…

Alloa Athletic FC (Escocia)

Pareciera el equipo de la abejita Conavi, pero nones: el Alloa Athletic FC es un club de una pequeña ciudad escocesa – 19,000 cristianos – del mismo nombre (es decir, sin lo del «Athletic», obvio),  fundado en 1878 (!!!) y que actualmente pulula por la segunda categoría del fútbol del país donde los hombres usan faldas sin que les sea cuestionado su rol primario en el hogar. El uniforme del equipo tradicionalmente ha sido con camiseta de rayas amarillas con negras, lo que les ha derivado en su apodo – «las avispas» – y por ende en la escogencia del bicho para su escudo. El tema es que si hubieran decidido decantarse por un avispón común y silvestre, todo bien, pero escogieron a un ser mutante de ojos como pasados de perico, super hormonado y con manillas de punk setentoso que al final le dan más apariencia de portero de bar de metal de Glasgow que de mascota de equipo de fútbol. La otra posibilidad es que las avispas allá sean así, lo que automáticamente me hace tachar otro país de la lista de los que quiero conocer.

Belediye Van Spor (o Van Büyükşehir Belediyespor) (Turquía)

Otro escudo francamente inquietante es este de un ¿castor? gigante vestido con traje y corbatín, que avanza mientras hace un «Sieg Heil«, empujando un balón con rostro frío e imperturbable por un valle bañado por un río anónimo, el cual suponemos está en o cerca de la localidad turca de Van – la sede del club hoy en segunda división -. Cualquier intento de explicar qué gran triple putas significa toda esta combinación de seres gigantescos vestidos de traje por un paisaje orográficamente áspero y cielo amarillento se nos escapa de las manos, así que consultamos algunas fuentes turcas que nos dicen que «Lig yükselme gruplarına kırmızı-mavi renklerle katıldı. Ancak başaramadı, iki başarısız denemeden sonra». Con esto se nos aclara un poco el significado del escudo, pero quedamos con algunas dudas…

Jaguares (Colombia)

El gran error de los equipos nuevos – sobre todo en Latinoamérica – es que por ahorrar / dárselas de modernos y de vanguardia, encargan el diseño del escudo a algún publicista amigo – generalmente el sobrino del dueño/principal accionista – . Y este, con el afán de ir a tono con lo que le enseñaron en el último semestre de la universidad, saca algún esperpento recargado y pesado, que compagina con muchísimas cosas menos con el símbolo de un club de fútbol. Tal cual pasa con Jaguares de Montería, que hoy luce un escudo imposible de dibujar, poco convocante y más ideal para estampar en la parte trasera de un bus que cubra la ruta Cereté – Ciénaga de Oro que para adornar la camiseta del equipo. Eso sin mencionar el hecho que es bien difícil encontrar en las serranías del sur del departamento un jaguar así como el del escudo por dos razones de peso: 1) no hay jaguares así con ojos de alienígena en la región, y, sobre todo 2) esa mierda que tienen dibujada ahí no es un jaguar sino un tigre (!!!).

Burton Albion (Inglaterra)

Cerramos por hoy con este escudo más grosso que feo del club de la localidad inglesa de Burton upon Trent, importante centro de producción cervecera del centro del país. Y nos emociona constatar que por esos lados respetan de manera honorable las dos profesiones más nobles de los hombres de bien (?): jugar fútbol y beber birra. El escudo del club representa no a un jugador equis cualquiera sino a un señor barrigón – like you or me (?) – que disputa con ardor y enjundia un balón con toda la polenta que le deja su panza. Hermoso símbolo de tan magno club, que nos debe llenar de orgullo a todos nosotros los que hemos sido erradicados de la práctica del fútbol profesional solamente por lucir en exceso un bumper notable. Desde esta humilde tribuna arropamos (?) al Burton Albion con todos los fierros, deseándole un pronto ascenso a la Premier mientras brindamos por ellos con unas amargas bien frías y con el que (no seguimos porque las lágrimas de emoción nos desbordan el teclado…).

YoSoyElCarlos

See author's posts